Sonambulismo
Muy común en ciertos individuos, especialmente en la adolescencia o en momentos de estrés. Es acompañado a veces por alucinaciones. Caminar dormido es normal como hecho ocasional en los niños. Si está agitado, excitado o bien actúa de manera que corra el peligro de hacerse daño, el sonambulismo puede ser una señal de angustia mental.
Lo mismo se aplica a los adultos. Muchos sonámbulos llevan a cabo acciones complicadas sin hacerse daño. Un joven de Portsmouth condujo el automóvil de su padre unos cincuenta kilómetros dormido, antes de despertarse en Southampton. La policía verificó su declaración y no le hizo cargos. Otras veces, en cambio, los sonámbulos pueden infligir graves daños a sí mismos o bien a terceros. Durante un llamado telefónico a la radio de Londres, un hombre me relató su experiencia de haber destrozado el vidrio de una ventana con el puño y de haberse seccionado una arteria, después de lo cual por poco no murió desangrado. En Estados Unidos y en Inglaterra se han cometido homicidios en los que el acusado afirmaba haber estado dormido, siendo absuelto.
Dada tan intensa actividad durante el sueño, muchos entre quienes tienen este tipo de sonambulismo se preocupan por lo que podrían hacerle a quien comparte la cama con ellos. En la mayoría de los casos uno se despierta al establecerse el contacto, o bien la persona involucrada despierta a su compañera, pero no cabe subestimar el elemento de riesgo. Cuando existe esta preocupación, puede haber mejores pers¬pectivas si comprendemos lo que sucedió con muchos hombres que empezaron a deambular dormidos después de un combate durante la guerra. En estos casos los movimientos, palabras y emociones fueron directamente observables en relación con experiencias traumáticas personales durante el conflicto. El proceso autorregulador en los sueños intentaba descargar la tensión, el horror o el dolor emocional de los hechos vividos. Cuando fue posible encarar conscientemente estas emociones, quizá con la ayuda de un psicoterapeuta, los movimientos de sonambulismo cesaron. Ello sugiere que la actividad dramática durante nuestros sueños ambulatorios tiene raíces semejantes y es posible tratarla.
Ver sleep walking