Matar Matador

Cada uno de nosotros está implicado en actos de matar, al negar, reprimir, controlar alguna parte de nuestra propia naturaleza. Estas zonas negadas de nuestra propia sensibilidad o potencial pueden afortunadamente resucitarse mediante una toma de conciencia de lo que hemos hecho. Si huimos de un asesino, eso representa el temor de que algo amenace nuestra confianza, o bien algo que realmente nos amenaza. Furia asesina en el soñante: es observable que la sexualidad reprimida provoca sentimientos de furia asesina que no es posible expresar socialmente, pero que aparecen en los sueños. También puede expresar enojo de la infancia relacionado con un daño en el lazo emocional entre madre e hijo.

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